l cáncer es una enfermedad de las células. Del alrededor de 500.000 millones de nuevas células que se crean en el cuerpo cada día, unas pocas son defectuosas, y de ellas se encarga el sistema inrnunológico. Ocasionalmente, sin embargo, algunas escapan a este sistema de policía, y empiezan a multiplicarse rápidamente, desarrollándose en un tumor o un cáncer e invadiendo el tejido sano. Los principales cánceres que afectan específicarnerue a las mujeres son el cáncer de mama, de ovarios, de cér­ vix y de útero.

El cáncer de mama es el el proceso degenerativo más común en las mujeres. Sus síntomas pueden indicar también otros desórdenes -nueve de cada diez bultos en los pechos son benignos-, pero informe siempre de ellos a su médico inmediatamente. Los síntomas pueden incluir:

• Bultos.

• Cambios en la forma o dirección del pezón.

• Hemorragia o secreción del pezón.

• Piel de naranja de la piel del pecho.

• Cambio en forma, tamaño o peso de un pecho.

• Pequeños bultos en la axila.

El cáncer de ovarios tiende a ser detectado más bien tarde debido a que los ovarios son tan pequeños -aproximadamente del tamaño de un
par de habichuelas- y se hallan muy protegidos dentro del cuerpo. En Gran Bretaña, cerca de 6.000 mujeres desarrollan cáncer de ovarios cada año. Los síntomas incluyen:

• Frecuencia urinaria.

• Pérdida de peso.

• Sensación de hinchazón persistente en el abdomen, o abdomen hinchado.

El cáncer de cérvix (el cuello del útero), es más común en las mujeres de 40 y 50 años, pero la proporción de mujeres de menos de 35 que desarrollan cáncer de cérvix está creciendo.

Cáncer uterino es de crecimiento muy lento y tiende a permanecer dentro del útero, de modo que los índices de supervivencia son altos. Sus
principales síntomas son:

• Hemorragia inusua! o inexplicable de la vagina.

Causas

Tener niños y darles el pecho parece proporcionar alguna protección contra el cáncer de mama. Sin embargo, los factores de riesgo incluyen:

• Factor familiar de cáncer de mama en parientes femeninos directos.

• Menstruacion temprana o menopausia tardía.

• Obesidad.

• Historial de bultos benignos en el pecho.

• No haber tenido hijos.

Haber tomado la píldora anticonceptiva combinada reduce el riesgo de cáncer ovárico (en un 80% si se ha tomado durante diez años). Los
factores de riesgo de esta forma de cáncer pueden incluir:

• Factor familiar de la enfermedad en parientes [emeninos directos.

Usar métodos anticonceptivos de barrera (preservativo, diafragma) tiene un efecto protector contra el cáncer de cérvix. Los factores de riesgo para este tipo de cáncer incluyen:

• Iniciar las relacianes sexuales antes de los 20 años.

• Tener muchas parejas sexuales [especialmente si éstas también las tienen).

• Fumar:

Los factores de riesgo del cáncer uterino incluyen:

• Edad (más común en mujeres de más de 50 años}.

• Obesidad.

• Inicio temprano de los períodos o menopausia tardía.

Tratamiento ortodoxo

a detección temprana del cáncer de mama incrementa las posibilidades de recuperación, de modo que acostúmbrese a chequear sus pechos el mismo día cada mes (dos o tres días después del final de su período, si todavía sigue menstruando). Los tests médicos incluyen unas radiografías especiales llamadas mamografías, o quizás una biopsia mediante una aguja para comprobar algunas de las células de la zona. El tratamiento para el cáncer de mama depende mucho de lo desarrollado que esté el cáncer, y puede incluir:

• Quimioterapia para reducir el tumor (por ejemplo, Tamoxifen).

• Cirugía, normalmente mlnima. (Nuevas investigaciones mundiales muestran que en la mayoría de los cánceres pequeños extirpar simplemeute el bulto tiene tanto éxito como la tnastectomia -extirpar todo el pecho-, si se combina con radioterapia.)

• Mastectomia en los casos más avanzados, en la cual se extirpan tauto el pecho como los nódulos linfáticos de la axila.

• Radioterapia y/o quimioterapia, o tratamiento hormonal, por ejemplo Tamoxifen tras cirugía.

Las pruebas para el cáncer ovárico incluyen:

• Escáner con ultrasonidos.

• Test de anticuerpos monoclonaies en la sangre (inyectados en el torrente sanguíneo, se unen a las células cancerosas y se muestran en un escáner).

Pueden usarse diferentes niveles de cirugía para remediar el cáncer ovárico, que van desde la extirpación de un solo ovario hasta una histerectomía, más la extirpación de ambos ovarios seguida por quimioterapia, y ocasionalmente radioterapia también.
Un frotis comprueba las anormalidades potencialmente cancerosas en y alrededor del cérvix, o el propio cáncer de cérvix. El tratamiento puede implicar.

• Cirugía láser para extirpar las células problemáticas, si la enfermedad no está muy avanzada, o una operación menor llamada biopsia sónica que extirpa sólo una cuña de tejido.

• Extirpación de todo el cérvix en los casos más avanzados, incluso una parte del útero.

• Radioterapia, y quizá quimioterapia, antes y/o después de la extirpacióu del cérvix o el útero.

El alcance de las pruebas médicas que pueden usarse para comprobar la presencia del cáncer uterino en una mujer incluyen:

• D & R (dilatación y raspado), una operación exploratoria para comprobar el revestimiento del útero.

• Investigación endoscópica usando un histeroscopio para examinar el interior de la cavidad del útero.

• Escáner de ultrasonidos.

l tratamiento para el cáncer uterino será al menos una histerectomía abdominal total y la extirpación de trompas y ovarios. Si la enfermedad está avanzada, se necesitará un tipo más radical de histerectomía, conocida como histerectomía de Wertheim, en la cual los nódulos linfáticos de alrededor son completamente extirpados, aunque los ovarios pueden ser dejados en su lugar.
La radioterapia sigue siempre a la cirugía, y las dosis y métodos administrados a cada mujer variarán según la severidad de cada caso
individual.

TRATAMIENTO COMPLEMENTARIO

ara el cáncer, las terapias complementarias deben de usarse junto con la medicina ortodoxa, no en vez de, para ayudar a sostener física y emocionalmente a la persona. Los tratamientos relacionados pueden ayudar en los cánceres femeninos de una forma general antes que específica. Los siguientes tratamientos pueden usarse para ayudar al cuerpo a luchar contra todos los tipos de cánceres mencionados.

Terapia nutricional

Una dieta bien planeada puede impulsar los poderes del sistema inmunológico y las habilidades autocuradoras. Pueden usarse
también hierbas para mejorar la función del hígado de modo que sea más eficiente en descomponer cualesquiera estrógenos que circulen en el torrente sanguíneo puesto que pueden alentar el desarrollo/crecimiento de los tumores femeninos tanto benignos como cancerosos.

Homeopatía

Los homeópatas creen que el cáncer refleja un profundo colapso en la salud, de modo que prescribirán un tratamiento constitucional. Cierto remedios como clematis o echinacea pueden también mejorar y estimular los mecanismos naturales de defensa del cuerpo.

Acupuntura

El tratamiento puede ayudar al proceso de recuperación y auxiliar al cuerpo a enfrentarse a todos les efectos tóxicos de la medicación, y también impulsar los niveles de energía de la mujer, ayudar a aliviar el dolor y reducir también la depresión.

Fitoterapia occidental

El tratamiento puede funcionar bien junto a los tratamientos convencionales ayudando a aliviar algunos de los síntomas del cáncer
y alentando al cuerpo a luchar contra la enfermedad. Los remedios útiles para ambas cosas incluyen: echinacea para promover la curación; violeta dulce, cuaja leche, trébol rojo y bardana para limpiar el sistema e impulsar las defensas inmunológicas; hipericón, un suave antidepresivo que actúa también como reconstituyente nervioso, para ayudar en la depresión o reducir el temor; verbena y romero como suave tónico para producir un suave efecto estimulante sobre el hígado.

Fitoterapia china

El tratamiento puede ayudar a sostener el sistema inmunológico y también a reducir los dañinos efectos secundarios del tratamiento, tanto quimioterápico como radioterápico.

 

Aromaterapia

Puede proporcionar un gran apoyo y ayudar a la gente con cáncer, pero los aceites esenciales no deberían de ser usados inmediatamente antes o después de la quimioterapia, puesto que el masaje puede acelerar la difusión de las células cancerosas en el cuerpo a través de los sistemas linfático y circulatorio. Así que para aquellos en los primeros estadios de la enfermedad, los aceites esenciales deberían aplicarse mediante baños tibios, o aerosoles con una bomba de aire. Para la gente en los estadios terminales, el masaje aromaterápico es de gran beneficio para la relajación y el sentido de bienestar, por lo cual es ampliamente utilizado en hospitales y residencias. Los aceites para finalidades específicas incluyen: geranio, naranja dulce y rosa para la depresión; romero, naranja dulce, sándalo, naranja amara o melisa para aliviar el cansancio y la falta de apetito que sigue a la quimioterapia y/o radioterapia; manzanilla e hinojo para combatir la náusea.

Remedios de las flores de Bach

Pueden tener un papel importante en promover una actitud mental más positiva en alguien con cáncer que sienta fuertes emociones negativas, por ejemplo: olivo para aquéllos que se sienten «drenados de energía por los sempiternos problemas»; aulaga para los sentimientos de impotencia o derrotismo; mimosa para el miedo; sauce para el resentimiento; remedio de rescate para enfrentarse a los efectos posteriores del shock del diagnóstico.

Otras terapias

a naturopatia ofrecerá nutrición de apoyo y aplicada para sostener y promover la energía y las defensas del cuerpo. El entrenamiento autógeno actuará para fortalecer el sistema inmunológico. La medicina ayurvédica apuntará a prevenir el cáncer con tridoshas equilibrantes y el método panchakarma. La hipnocuración proveerá afirmaciones positivas para el bienestar y el cambio, mientras que la autohipnosis activará y apoyará los procesos curadores del cuerpo. La terapia de control celular activará la regeneración y reemplazo de células sanas. Con ciertos cánceres, un reflexólogo trabajará sobre cada reflejo para apoyar al individuo. Una suave práctica yoga, si la persona está lo bastante bien, puede ayudar a reducir los niveles generales de estrés y a promover también la relajación usando suaves asanas, relajación, pranayama y meditación. Para mejorar y fortalecer el sistema inmunológico, los cromoterapeutas usarán luces índigo y azul
profundo hechas brillar sobre la piel desnuda, o ropa interior o cuadrados de seda de esos colores llevados cerca de la piel sobre la zona correspondiente. Para eliminar la depresión y promover la autoestima se usarán colores amarillos claros y verdes alegres. También es aconsejable la hidroterapia.