¿Qué es?
 
os músculos, huesos, ligamentos y articulaciones del cuerpo forman el sistema musculoesquelético. Sus principales funciones son el movimiento y la protección. El sistema está construido alrededor del esqueleto del cuerpo, que consiste en una serie de huesos ligeros y fuertes con una dura capa exterior (hueso compacto) y una capa interior más ligera llena de orificios  (hueso esponjoso). Los huesos largos, como el fémur, tienen una cavidad central llena con medula ósea que contiene el tejido que produce los glóbulos rojos y blancos de la sangre. Los huesos del esqueleto están conectados unos con otros por diferentes articulaciones. Las articulaciones en bola y alvéolo (la cadera y el hombro) permiten el máximo movimiento.
Los músculos están formados por células microscópicas llamadas fibras musculares. Hay dos tipos de músculos en el cuerpo involuntarios y voluntarios, que normalmente trabajan en grupos. Los músculos involuntarios, como los del corazón y el tracto digestivo, no se hallan bajo nuestro control consciente. Permiten el movimiento y el transporte dentro del cuerpo. Los músculos voluntarios se hallan bajo nuestro control y ayudan en actividades como caminar y escribir. Los músculos pueden contraerse y  relajarse, y durante la contracción un músculo puede acortarse hasta un 40%. Los ligamentos rodean las articulaciones y mantienen la estabilidad.

  Las fibras musculares se forman alrededor del esqueleto del cuerpo, que esta constituido por huesos ligero y fuertes, unidos por articulaciones. Músculos involuntarios y voluntarios controlarn el movimiento corporal,

¿Qué puede ir mal?
 
no de los problemas más comunes del sistema musculoesquelético es las molestias en las articulaciones por lesión o desgaste. Las lesiones causan inflamación y dolor. Los ligamentos distendidos o desgarrados tienden a curar más rápidamente. Una fractura del cuello del hueso largo de la cadera (fémur) es común tras una caída en las personas viejas. Esto se debe normalmente al adelgazamiento de los huesos con la edad (osteoporosis). El desgaste óseo es a menudo sinónimo de osteoartritis y afecta comúnmente a las rodillas, caderas y cuello de las personas viejas. La artritis reumatoide es una inflamación de las articulaciones que causa inflamación y rigidez. El dolor de espalda, que puede afectar hasta a un 70% de la población. Normalmente el problema se debe a una mala postura o a levantar pesos pesados, que causan una lesión en músculos y ligamentos. A veces el dolor de espalda se debe a un nervio atrapado (ciática), lo cual produce dolor en la parte de atrás de la pierna. Ocasionalmente la causa del dolor de espalda es un «disco desplazado». Enfermedades genéticas, como la distrofia muscular, pueden inducir una debilidad progresiva de los músculos y a menudo son fatales.