¿Qué es?
 
Es una enfermedad vírica muy infecciosa con un periodo de incubación de dos a tres semanas. Normalmente es suave. Empieza con síntomas de resfriado y perdida de apetito, a veces con dolor de garganta e hinchazón de los nódulos linfáticos en el cuello y fiebre suave. Un día más tarde aparece un sarpullido hormigueante, en general primero en el rostro. Otras enfermedades víricas son idénticas, de modo que las mujeres no deben suponer que están inmunizadas porque han tenido síntomas similares a la rubéola.
La enfermedad remite normalmente en una semana, pero si una mujer que no está inmunizada entra en contacto con ella durante los primeros cuatro meses de embarazo hay un serio riesgo de aborto y defectos fetales.
Los niños deben de ser mantenidos en casa cuando sufran rubéola, aunque parezcan estar bien.
 
Causas
 
El virus, transmitido por las gotitas en el aire, contagia desde unos días antes de la aparición de los síntomas hasta un día después de que desaparezcan.
 
Tratamiento ortodoxo
 
El tratamiento normal para esta enfermedad consiste en:

• Paracetamol para eliminar la fiebre y reducirla incomodidad.

• Pueden prescribirse cremas y ungúentos si el sarpullido pica mucho, entre ellos calamina y preparados esteroideos suaves.

Para minimizar el riesgo de rubéola en el embarazo, puede efectuarse un análisis de sangre en las muchachas adolescentes para asegurarse de que están inmunizadas. Un homeópata puede hacerlo usando el nosodo rubella.
(Ver Sarampión para detalles de la vacuna trivalente.)
 
TRATAMIENTO COMPLEMENTARIO 
 
Aromaterapia
 
Cualquier enfermedad de infancia con erupciones cutáneas que producen sarpullido responden bien a la aromaterapia. Intente  baños y ligeros masajes con una mezcla a un 2,5% de aceites esenciales como árbol del té, manzanilla romana y espliego. El árbol del té y la espliego son especialmente útiles para cualquier infección vírica, y pueden usarse en dosis muy pequeñas en un baño caliente con niños jóvenes.
 
Otras terapias
 
Un homeópata puede recomendar 'phytolacca' (para glándulas hinchadas, oídos dolorosos y si los síntomas son aliviados por bebidas frías) o 'pulsatilla' (en el inicio del sarpullido si el niño está enrojecido y tiene mucosidades amarillas). Los fitoterapeutas occidentales utilizan una variedad de hierbas para bajar la fiebre y luchar contra la infección, y pueden sugerir frotar la piel con una infusión fría de espliego. Se recomienda hidroterapia.

FIEBRE

 
¿Qué es?
 
Una temperatura corporal por encima de lo normal 37º C se clasifica como fiebre, y es el modo que emplea el cuerpo para ayudar a eliminar los patógenos invasores que causan infección. Cualquier temperatura por encima de los 39º C en un niño puede ser seria, asi que llame al médico.
Frote el cuerpo del niño con una esponja mojada en agua tibia y tápelo sólo con una sábana de algodón. No ponga nunca al niño en un baño frío. Los padres pueden preocuparse de que una temperatura alta promueva convulsiones febriles. Son benignas si duran menos de 10 minutos, y sólo se relacionan con la epilepsia en un 2-4% de los casos.
 
Causas
 
La fiebre suele estar causada por una infección bacteriana o vírica (como las enfermedades comunes de la infancia descritas aquí) e infecciones del tracto respiratorio superior.
 
Tratamiento ortodoxo
 
Puede administrarse paracetamol para reducir una fiebre debida a infección. Se prescribirán antibióticos para las infecciones bacterianas. Puede usarse diazepan (tranquilizante) por vía rectal para impedir en niños muy vulnerables que sufran un acceso.
 
 TRATAMIENTO COMPLEMENTARIO 
 
SI LA FIEBRE DE UN NIÑO SE MANTIENE POR ENCIMA DE LOS 39º C DURANTE MÁS DE SEIS HORAS, LLAME INMEDIATAMENTE PARA TRATAMIENTO MEDICO DE EMERGENCIA.
 
Homeopatía
 
Los remedios incluyen 'apis' si el niño se siente helado y se queja de dolores punzantes, 'arsenicum' si está agotado y frío, y 'aconite' y 'belladonna' para la fiebre alta.
 
 

Otras terapias
 
La fitoterapia china tradicional y la occidental pueden ayudar y calmar. Los tratamientos occidentales incluyen infusiones de borraja, manzanilla alemana, caléndula, eucalipto, pimienta de Cayena (quizá en una bebida caliente), corteza de sauce y eupatorio. Un aromaterapeuta puede sugerir un lavado con esponja tibia con aceites esenciales de petitgrain y manzanilla  romana. La reflexología irá dirigida al hipotálamo, glándulas endocrinas y sistema linfático.